Trump respalda posible compra de TikTok por parte de Musk: ¿una nueva jugada en el tablero tecnológico?
El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se ha pronunciado a favor de que Elon Musk, magnate de la tecnología y CEO de empresas como Tesla y SpaceX, lleve a cabo la compra de TikTok si así lo desea. Durante una reunión y en declaraciones que no han tardado en captar la atención de los círculos económicos y tecnológicos, Trump expresó su respaldo a una potencial transacción entre Musk y la popular plataforma de videos cortos de origen chino, propiedad de ByteDance.
En un contexto donde TikTok ha estado bajo escrutinio en Occidente debido a preocupaciones relacionadas con la privacidad de los datos y su posible vínculo con el gobierno chino, la posición de Trump se alinea con sus antecedentes. Recordemos que, durante su mandato, lanzó una serie de medidas para intentar prohibir TikTok en suelo estadounidense a menos que se transfiriera su propiedad a una compañía norteamericana. Ahora, fuera de la Casa Blanca, el expresidente mantiene un discurso que enfatiza la «deschinizacion» de activos tecnológicos que operan en Estados Unidos.
No obstante, el comentario de Trump parece más una opinión personal que una señal de que Elon Musk tenga algún plan inmediato para adquirir TikTok. A pesar de su creciente influencia en el ecosistema tecnológico global y de incursiones más recientes, como su adquisición de Twitter en 2022 (ahora renombrada como X), no ha habido confirmación oficial por parte de Musk o sus empresas sobre un posible interés en TikTok.
La plataforma tiene un valor significativo en términos de usuarios y generación de ingresos, lo que la convierte en un activo codiciado. Según reportes de mercado, TikTok cuenta con más de mil millones de usuarios activos mensuales a nivel global, posicionándose como uno de los líderes del entretenimiento digital. Sin embargo, el camino hacia una potencial adquisición no sería sencillo, ya que implicaría enfrentar tanto desafíos regulativos como geopolíticos.
Las palabras de Trump también echan luz sobre el complejo panorama de las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China. TikTok sigue siendo un símbolo de la creciente rivalidad tecnológica entre ambas potencias, lo que ha llevado a su dueña, ByteDance, a explorar caminos para separar su operación en Estados Unidos de su matriz china, aunque no se ha concretado una solución definitva.
En paralelo, algunos analistas financieros ven en Musk un actor que podría jugar un rol disruptivo en el sector de las redes sociales, ante sucesos recientes como la compra de Twitter. Sin embargo, aún queda por verse si este interés hipotético llegaría a materializarse en otra adquisición de alto calibre y qué implicancias tendría para el mercado global.
En cualquier caso, las palabras de Trump reavivan el debate sobre el futuro de TikTok en Estados Unidos y la influencia de pesos pesados como Musk en la redefinición del ecosistema digital.
