Ørsted explora la venta parcial de su participación en Hornsea 3 para apuntalar su estrategia financiera
La compañía danesa Ørsted, líder mundial en energía eólica marina, está en busca de un comprador para desprenderse de la mitad de su participación en el proyecto Hornsea 3, uno de los parques eólicos más grandes del mundo, ubicado en el Reino Unido, según informó iEconomia.com citando al medio británico Bloomberg.
Hornsea 3, que será la tercera etapa del gigantesco polo eólico desarrollado por Ørsted en el Mar del Norte, tendrá una capacidad de generación de 2,85 gigavatios y podría proveer electricidad a más de tres millones de hogares en tierra firme. Sin embargo, el imponente proyecto también lleva asociados costos multimillonarios, lo que ha llevado a la empresa a buscar socios financieros que ayuden a mitigar los riesgos económicos.
Según la información publicada, Ørsted posee actualmente el 100% de Hornsea 3 y estaría interesada en vender el 50% de su participación a inversores estratégicos, principalmente fondos de inversión o compañías energéticas que deseen incursionar o expandirse en el mercado de las energías renovables. Este movimiento no es inédito dentro de la empresa, que ha implementado estrategias similares en el pasado, transfiriendo participaciones en otros proyectos para liberar capacidad financiera e impulsar su crecimiento global.
El contexto energético global sigue siendo desafiante, marcado por crecientes costos de financiamiento debido al aumento de las tasas de interés y condicionantes derivados de la transición energética hacia fuentes renovables. A pesar de estos desafíos, Ørsted continúa posicionada como una de las principales referencias en el sector, gracias a su fuerte apuesta por proyectos a gran escala como Hornsea 3.
El Mar del Norte, donde Hornsea 3 ya está en desarrollo, es uno de los territorios más prometedores para la expansión de la energía eólica marina debido a su viento constante y alta capacidad de generación. Sin embargo, la escala y la complejidad de operar en esta región conllevan significativos desafíos financieros y logísticos que empresas como Ørsted deben resolver para garantizar la viabilidad y escalabilidad de sus proyectos.
Aún no hay un comprador confirmado ni se han revelado las condiciones de la posible transacción, pero medios cercanos a las negociaciones estiman que atraerá interés de inversores de Europa y Asia, así como de fondos soberanos que han demostrado un creciente interés en activos renovables.
En un comunicado, la compañía no se pronunció específicamente sobre el proceso de venta, pero reafirmó su compromiso con el desarrollo de energías limpias y aseguró que buscará las mejores opciones financieras para mantener su liderazgo en el mercado eólico global.
La eventual transacción será un importante termómetro para medir el apetito inversor por activos energéticos renovables en un contexto económico global incierto y podría sentar un precedente para futuras operaciones estratégicas en el segmento.