Advertencia: Un regreso de Trump podría no ser tan beneficioso para los mercados estadounidenses
En un contexto en el que el escenario político de Estados Unidos vuelve a captar la atención global, analistas del mercado financiero han comenzado a cuestionar los efectos que una potencial victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2024 podría tener sobre los mercados de valores. A pesar de la narrativa común que asocia a los gobiernos republicanos con beneficios económicos y bursátiles, un informe reciente advierte que no todo sería positivo para Wall Street si el expresidente regresa al poder.
Entre los puntos destacados por los expertos, se encuentra la posibilidad de una mayor volatilidad e incertidumbre en los mercados. Aunque Trump se ganó reputación durante su mandato previo (2017-2021) como un defensor de políticas pro-mercado, algunos analistas recuerdan que ciertas medidas adoptadas generaron tensiones que afectaron temporalmente a las acciones. Un ejemplo claro fue la guerra comercial con China, que, si bien buscó proteger intereses industriales estadounidenses, tuvo repercusiones en las empresas tecnológicas y en cadenas de suministro globalizadas.
Además, se resalta que, al contrario de lo que muchos suponen, los mercados no siempre responden de manera predecible ante la orientación política de un gobierno. Según un estudio histórico citado en el informe, los mercados tienden a ser igualmente rentables en administraciones tanto republicanas como demócratas, colocándose más bajo la influencia de factores externos como las políticas monetarias de la Reserva Federal, el panorama global y el comportamiento económico local.
Por otro lado, el informe también subraya que Trump podría impulsar políticas fiscales expansivas. Esto se traduciría en beneficios para sectores como infraestructura y defensa, que ya contaron con aumentos sustanciales de financiamiento durante su primer periodo en la Casa Blanca. Sin embargo, el enfoque de «América Primero» que caracterizó su agenda pasada podría ahondar tensiones comerciales internacionales, generando efectos mixtos para las empresas intensivamente globalizadas.
Con los valores bursátiles en un entorno de creciente sensibilidad ante cambios económicos y geopolíticos, los mercados mantienen la prudencia respecto a este posible escenario. La falta de certeza sobre las próximas elecciones y el eventual posicionamiento de Trump refuerzan los riesgos para los inversores frente a un entorno ya dominado por preocupaciones como la inflación y la presión en las tasas de interés.
En definitiva, mientras algunos sectores podrían encontrar ventajas potenciales en un regreso de Trump, el mercado en su conjunto probablemente enfrentaría nuevos desafíos. La eventual reaparición del magnate en la Casa Blanca abre interrogantes sobre la estabilidad que podría dominar durante su posible segundo mandato. Así, los inversores deben mantenerse atentos a las señales y prepararse para un camino marcado por fluctuaciones.