El presidente de Colombia, Gustavo Petro, aseguró el pasado domingo que los países miembros del Grupo de los 20 (G20) están expresando serias preocupaciones en torno a los potenciales efectos adversos derivados del rápido avance de la inteligencia artificial (IA). Estos comentarios se realizaron en un contexto donde la tecnología está transformando rápidamente diversos sectores, pero también generando incertidumbres sobre su impacto en términos económicos, laborales y sociales.
Petro destacó que los líderes más relevantes del mundo están evaluando las implicancias de la IA, desde la creación de empleos hasta los riesgos asociados con la automatización y el desplazamiento laboral. En sus palabras, la IA no solo es un motor para la innovación, sino que también podría generar fuertes cambios en las dinámicas laborales, amenazando millones de empleos en distintas industrias.
«Gran parte del debate internacional se está centrando en cómo esta nueva fase de desarrollo tecnológico podría generar desigualdades más pronunciadas si no se gestiona adecuadamente», afirmó Petro. Según el mandatario, uno de los principales desafíos que enfrentan los gobiernos y las empresas es cómo equilibrar la adopción masiva de estas tecnologías con la protección de los empleos y derechos de los trabajadores.
En ese sentido, Petro señaló que la clave se encuentra en la regulación proactiva de la inteligencia artificial. Las autoridades deben trabajar no solo en contener sus posibles efectos negativos, sino también en asegurar que las innovaciones tecnológicas estén al servicio de la humanidad, y no al revés. Asimismo, propuso pensar en nuevas formas de trabajo y modelos económicos que puedan mitigar los efectos más disruptivos de la automatización y la IA.
El presidente colombiano enfatizó que otro tema clave es el impacto que estas tecnologías pueden tener en términos éticos. Agregó que, hasta el momento, se ha discutido poco sobre los peligros que podrían traer la utilización de sistemas de inteligencia artificial sin una supervisión adecuada.
El tema de la inteligencia artificial fue uno de los varios asuntos en la agenda global del G20, donde también se trataron otros desafíos como el cambio climático, la inflación mundial y la creciente desigualdad. Sin embargo, la creciente atención en la IA muestra hasta qué punto esta tecnología se ha transformado en un tema esencial para las principales economías del mundo.
Petro aprovechó la ocasión para remarcar la necesidad de que América Latina juegue un rol activo en este debate. En este sentido, señaló que la región tiene potencial para sacar provecho de estas innovaciones, pero al mismo tiempo, debe estar mejor preparada para enfrentar los desafíos laborales y sociales que conllevan las nuevas tecnologías.
