Madrid, 13 de junio de 2025 – La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) ha emitido un informe que alerta sobre una preocupante evolución alcista en los precios de los alimentos, un fenómeno que podría tener serias repercusiones en la economía española. Según el documento, los incrementos en los costos de producción y la inestabilidad en los mercados internacionales están impulsando esta tendencia, que amenaza con erosionar el poder adquisitivo de los consumidores.
El informe de Funcas destaca que, en los últimos meses, se ha observado un aumento sostenido en los precios de productos básicos como el pan, la leche y las frutas. Este fenómeno, según los expertos, se debe a una combinación de factores que incluyen el encarecimiento de las materias primas, el aumento de los costos energéticos y las dificultades logísticas derivadas de conflictos internacionales.
Los analistas de Funcas advierten que, de no tomarse medidas correctivas, la inflación en los precios de los alimentos podría superar el 10% a finales de año. Esta situación no solo afectaría a los hogares con menores ingresos, sino que también podría tener un impacto negativo en la recuperación económica del país, que aún se está recuperando de los efectos de la pandemia de COVID-19.
En respuesta a esta situación, el Gobierno ha anunciado la creación de un comité interministerial para abordar el problema de la inflación alimentaria. Este comité tendrá como objetivo principal identificar medidas que puedan mitigar el impacto de los aumentos de precios en los consumidores, así como fomentar la producción local para reducir la dependencia de las importaciones.
Por su parte, las asociaciones de consumidores han expresado su preocupación por el impacto que esta tendencia podría tener en los hogares españoles. En un comunicado, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha instado al Gobierno a implementar políticas que protejan a los consumidores más vulnerables y a garantizar la transparencia en la formación de precios.
El sector agrícola también ha manifestado su inquietud ante esta situación. Los agricultores señalan que, aunque los precios de venta han aumentado, los beneficios no se han visto reflejados en sus ingresos debido al incremento de los costos de producción. En este sentido, solicitan al Ejecutivo medidas de apoyo que les permitan afrontar esta coyuntura sin comprometer la viabilidad de sus explotaciones.
En conclusión, el informe de Funcas pone de manifiesto la necesidad de una acción coordinada entre el Gobierno, el sector privado y los consumidores para abordar el desafío de la inflación alimentaria. La evolución de los precios en los próximos meses será crucial para determinar el impacto de esta tendencia en la economía española y en el bienestar de sus ciudadanos.