España busca captar hasta 3.000 millones en última subasta de bonos 2023

España buscará captar hasta 3.000 millones de euros en su última emisión de bonos y obligaciones del año

En una apuesta final para cerrar su estrategia de financiamiento en 2023, el Tesoro español tiene previsto colocar mañana, jueves, hasta 3.000 millones de euros en bonos y obligaciones del Estado. Esta subasta marcará la última del calendario anual del país, que tiene como objetivo cumplir su plan de financiamiento público frente a un entorno económico desafiante tanto a nivel regional como global.

Según informó el organismo encargado de la gestión de la deuda pública, España emitirá títulos en cuatro bloques con distintos plazos y características. En primer lugar, se subastarán bonos a tres años con cupón del 2,80%. Estos títulos fueron emitidos inicialmente el pasado mes de noviembre, lo que posiciona este instrumento como una pieza clave para atraer a inversores interesados en la renta fija a corto plazo. Además, se ofrecerán obligaciones a 10 años con cupón del 3,15%, títulos que se encuentran entre los más negociados en el largo plazo.

Por otro lado, el Tesoro incluirá en la subasta obligaciones a 15 años indexadas a la inflación con cupón del 0,70%, un activo que se perfila como una alternativa más segura frente a los episodios inflacionarios a nivel global. Finalmente, se ofertarán obligaciones a 20 años con cupón del 1,45%, que apuntan a completar la demanda de activos estables en los portafolios de los grandes gestores de fondos y bancos internacionales.

Hasta ahora, el Tesoro de España ha demostrado una sólida capacidad para gestionar sus necesidades de financiamiento. Según datos oficiales, el país ya ha captado más de 100.500 millones de euros netos en lo que va de 2023, cumpliendo íntegramente con el objetivo establecido para este año. Sin embargo, todavía queda margen para cubrir el porcentaje del endeudamiento renovable, impulsado por la refinanciación de títulos de deuda próximos a su vencimiento.

Esta última subasta llega en un contexto en el que tanto Europa como España enfrentan desafíos económicos significativos, incluyendo el impacto de la inflación persistente, el aumento de los costos de endeudamiento debido a las decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo, y la incertidumbre por la desaceleración económica global. Incluso ante estas condiciones, el Tesoro ha logrado mantener la confianza de los inversores al obtener rendimientos estables en sus colocaciones.

La emisión del jueves permitirá medir el apetito final de los mercados por la deuda española en un año marcado por la volatilidad. Con un cierre inminente del ejercicio fiscal, el éxito de esta subasta podría consolidar la percepción de estabilidad en las finanzas públicas del país, que continúa cumpliendo sus compromisos en materia fiscal frente a un panorama económico incierto.

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