Empresa eléctrica vinculada a EPM entregará dividendo récord en Panamá
En una noticia que resalta la solidez financiera de los negocios eléctricos en la región, la empresa ENSA, una distribuidora eléctrica controlada por Empresas Públicas de Medellín (EPM), ha anunciado la entrega de un dividendo récord de 40,5 millones de dólares a las arcas del Estado panameño. Este monto corresponde a las utilidades obtenidas en 2022 y representa la cifra más alta registrada en la historia de esta compañía.
ENSA, que opera como distribuidora eléctrica en Panamá, es una subsidiaria de EPM, uno de los conglomerados públicos más importantes de América Latina. Este último controla el 51% de la empresa panameña, mientras que el restante 49% está en manos del gobierno de Panamá. Como accionista minoritario, el Estado panameño percibió directamente los beneficios de estas operaciones mediante el dividendo extraordinario, especialmente significativo en un contexto económico desafiante para muchos países de la región.
Este hito financiero refuerza el liderazgo de EPM en el sector energético de América Latina y subraya su capacidad para generar ingresos sostenibles y de alto impacto. ENSA distribuye cerca del 48% de la electricidad en Panamá, atendiendo a más de 1.2 millones de clientes residenciales, comerciales e industriales. Su gestión eficiente y el constante crecimiento de su red eléctrica han sido factores determinantes en el alcance de estos resultados positivos.
El gerente general de ENSA, el panameño Gilberto Ferrari, destacó la importancia de este dividendo para el desarrollo económico del país y la relevancia de la compañía como un actor clave en el suministro de electricidad confiable en Panamá. Según Ferrari, estos logros financieros reflejan el compromiso de ENSA con la sostenibilidad y su papel en garantizar la estabilidad energética de la región.
En el marco de esta entrega de dividendos, EPM también reafirmó su estrategia de diversificación y crecimiento en Latinoamérica, donde tiene presencia en mercados clave, como Panamá, Colombia, México, Chile y El Salvador. Esto se alinea con una visión global en la que el conglomerado apuesta por combinar modelos de negocio sostenibles con un fuerte componente social.
Por otro lado, es relevante notar que el éxito de ENSA no solo es un alivio para las finanzas públicas panameñas, sino también un ejemplo de cómo las alianzas público-privadas pueden generar grandes beneficios económicos. Sin embargo, expertos en el sector han señalado que los retos continúan, incluyendo la necesidad de modernizar infraestructuras y adaptarse a la creciente demanda de energías renovables.
En definitiva, con este dividendo récord entregado por ENSA, EPM consolida su posición como líder regional y subraya el potencial de los mercados eléctricos latinoamericanos. El impacto positivo de este logro no solo se refleja en los balances financieros, sino también en el bienestar y desarrollo económico de Panamá, un ejemplo de cooperación exitosa entre empresas públicas y gobiernos estatales.