Impacto limitado en la UE tras el cese del tránsito de gas ruso por Ucrania, según Bruselas
La Comisión Europea ha tranquilizado a los mercados al prever un impacto limitado en la Unión Europea (UE) tras la reciente decisión de Gazprom, la principal empresa gasífera de Rusia, de cesar el suministro de gas natural a través de Ucrania. Según Bruselas, el fin del tránsito a través de este importante corredor no alterará significativamente el abastecimiento energético del bloque, gracias a las estrategias y medidas adoptadas para diversificar las fuentes de energía desde la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022.
La portavoz de Energía de la Comisión Europea, Susanne Baltzer, destacó en una conferencia de prensa que los flujos de gas desde Rusia a través de Ucrania ya eran limitados en los últimos meses y que el suministro energético europeo depende cada vez menos del gas ruso. Esta desconexión progresiva ha permitido a los estados de la UE prepararse para afrontar escenarios de interrupciones en el suministro, evitando problemas de abastecimiento durante el invierno, la época de mayor consumo.
En los últimos años, la UE ha implementado cambios significativos en su política energética para reducir su dependencia del gas ruso?año atrás cerca del 40 % de su suministro energético provenía de ese país. Estas medidas incluyen la diversificación de proveedores internacionales, aumentos en las importaciones de gas natural licuado (GNL) y mejoras en el almacenamiento de energía. Actualmente, los niveles de reservas de gas en Europa superan el 97 %, un nivel récord que refuerza la capacidad de los países de la región para afrontar cualquier interrupción del suministro.
El corte del suministro surge en medio de tensiones geopolíticas entre Moscú y Kiev, así como del continuo deterioro de las relaciones entre Rusia y la UE. Ucrania ha acusado a Gazprom de incumplir sus contratos de tránsito, y el gigante energético ruso justificó su decisión señalando supuestas irregularidades en el manejo del gas. Mientras tanto, Bruselas subrayó que los contratos deben ser respetados y reafirmó su compromiso de garantizar la seguridad energética en el bloque.
Por otra parte, los expertos y analistas globales sugieren que la disminución en la relevancia del gas ruso en el mercado europeo podría sentar un precedente importante en el comercio energético global, al tiempo que aumentan las tensiones en las relaciones económicas entre ambos bloques. Este contexto subraya la aceleración de las inversiones en energías renovables como parte del plan europeo de transición energética.
En conclusión, Bruselas se muestra confiada en que, a pesar de la maniobra de Gazprom, la UE está bien posicionada para evitar una crisis energética, incluso en los meses más críticos del año. Sin embargo, el panorama sigue reflejando las complejidades de la actual geopolítica energética global, con consecuencias a mediano y largo plazo aún por definirse.