Acciones chinas cotizadas en EE.UU. enfrentan retrocesos tras reciente repunte
En medio de una semana volátil para los mercados internacionales, las acciones chinas negociadas en Estados Unidos experimentaron un retroceso significativo, según informa iEconomia.com. El repliegue surge después de un notable repunte en las sesiones previas, lo que subraya la incertidumbre persistente alrededor de la economía china y su impacto global, particularmente en el contexto de tensiones comerciales y ajustes en las proyecciones de crecimiento.
El índice Nasdaq Golden Dragon, que hace un seguimiento de las principales empresas chinas cotizadas en los Estados Unidos, registró una caída del 1,5% el martes. Entre las empresas más afectadas destacan gigantes tecnológicos como Alibaba (NYSE:BABA), que disminuyó un 2,1%, y JD.com (NASDAQ:JD), que retrocedió un 2,3%. Del mismo modo, acciones de otras compañías vinculadas al sector tecnológico y del consumo, como Pinduoduo (NASDAQ:PDD) y Baidu (NASDAQ:BIDU), también reflejaron saldos negativos en la última sesión.
El reciente retroceso se produce tras un período de euforia en el mercado, impulsado por expectativas de estímulos y señales de recuperación económica desde Beijing. Sin embargo, las dudas sobre la fortaleza estructural del crecimiento chino, sumadas a las persistentes tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China, están generando oleadas de volatilidad que los inversores no han podido ignorar. A ello se suma la preocupación sobre las débiles cifras de consumo interno y sobre el impacto de la desaceleración global en sectores clave como tecnología y comercio electrónico.
Un factor adicional que contribuyó al ánimo negativo fue la publicación de datos que indican una moderación en las ventas minoristas de las festividades recientes en China. Aunque los días feriados habían sido impulsados por el gobierno como una oportunidad para dinamizar la economía interna, los resultados no cumplieron completamente con las expectativas del mercado, agregando mayor presión sobre las acciones chinas que cotizan fuera del país asiático.
Los analistas también atribuyen este comportamiento a una percepción más ajustada del riesgo global, marcada por preocupaciones sobre una posible desaceleración generalizada de la economía a nivel mundial. Además, las políticas monetarias restrictivas por parte de los principales bancos centrales parecen estar afectando la confianza de los inversores en activos considerados más volátiles.
La relación entre Estados Unidos y China sigue siendo un foco importante. Recientes sanciones comerciales e iniciativas para limitar el acceso de empresas chinas a tecnologías estratégicas estadounidenses continúan generando incertidumbre entre los inversores, que ven en estas tensiones un freno adicional para el desempeño bursátil de las compañías con vínculos significativos en ambos mercados.
En este complejo panorama, los inversores mantienen una postura cautelosa, mientras esperan señales más claras sobre cómo evolucionará no solo la economía china, sino también las relaciones comerciales y diplomáticas entre las dos mayores potencias del mundo.