Huelga de trabajadores de Menzies afecta a aeropuertos clave en Portugal
Los trabajadores de Menzies Aviation, empresa británica dedicada a servicios aeroportuarios, han iniciado una huelga de cinco días en reclamo de mejoras salariales y condiciones laborales, lo que está generando disrupciones importantes en los aeropuertos de Portugal. Este paro, convocado por el Sindicato de Trabajadores de la Aviación Comercial y Aeropuertos (SITAVA), afecta especialmente a los aeropuertos de Lisboa, Oporto, Faro y Funchal, los cuales son fundamentales para el turismo y el tráfico aéreo del país europeo.
Según un comunicado emitido por SITAVA, los empleados demandan un aumento salarial acorde con los niveles de inflación que enfrenta la economía portuguesa, la cual cerró 2022 con una inflación anual del 7,4%. Además, los trabajadores exigen mejores condiciones contractuales tras años de lo que consideran remuneraciones insuficientes y cargas laborales agravadas por el impacto de la pandemia en la industria de la aviación.
Por su parte, Menzies Aviation, que administra servicios de handling y operaciones en tierra para múltiples aerolíneas, asegura haber realizado esfuerzos para mitigar las interrupciones y ha calificado la huelga como «desafortunada». Aunque la empresa afirma estar comprometida con alcanzar un acuerdo negociado, el sindicato sostiene que las ofertas presentadas por la compañía no responden al contexto económico real ni al esfuerzo continuo de los empleados en un sector esencial para el transporte aéreo.
Los primeros días de huelga ya han provocado retrasos y dificultades operativas en los aeropuertos afectados. Según diversas autoridades locales, los pasajeros que transitan por estos aeropuertos deben prever potenciales demoras en los servicios de carga, desembarque y embarque, lo que podría complicar especialmente el flujo turístico durante el fin de semana.
Este conflicto laboral en Menzies se produce en un contexto donde otras áreas del sector aéreo en Europa han experimentado tensiones similares. La recuperación de la industria tras el impacto del COVID-19 enfrenta la presión de un encarecimiento de vida generalizado y la necesidad de mantener estándares operativos frente a la creciente demanda de los viajeros. Portugal, cuyo turismo representa cerca del 15% del PIB, enfrenta un desafío particular, ya que el sector aeroportuario es clave para sostener la competitividad del país como destino turístico.
Con esta huelga en curso, los analistas estarán atentos a cómo evolucionan las negociaciones en los próximos días, pues un estancamiento prolongado podría significar no solo mayores molestias para los usuarios, sino también un impacto negativo en la percepción del servicio aeroportuario en Portugal, en pleno auge de la temporada alta de turismo.
Desde iEconomia.com seguiremos monitoreando los desarrollos de este conflicto y su impacto en la economía y el transporte aéreo europeo.