En el marco de un viaje oficial a Brasil, Sergio Massa, ministro de Economía de Argentina, resaltó la necesidad de modernizar y flexibilizar las reglas del Mercosur para favorecer parámetros más competitivos frente a otros bloques comerciales. La petición ocurre en medio de reuniones bilaterales con el ministro de Hacienda brasileño, Fernando Haddad, y otros funcionarios, donde se discutieron temas estratégicos en materia económica y de integración regional.
Massa insistió en que el Mercosur debe transitar hacia una mayor dinamización de sus acuerdos comerciales, lo que incluye flexibilizar las normativas que actualmente regulan las relaciones entre sus países miembros. Según el funcionario argentino, esto permitiría un posicionamiento más competitivo frente a otras alianzas como la Unión Europea o el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP).
Uno de los puntos clave es avanzar en políticas que no solo mantengan el espíritu de integración del Mercosur, sino que también incentiven nuevas oportunidades de comercio extrarregional. En este sentido, Argentina está interesada en promover acuerdos bilaterales que potencien las exportaciones, particularmente en un contexto de creciente incertidumbre económica local e internacional.
Por su parte, Brasil, en su rol de principal socio comercial de Argentina dentro del bloque, ratificó su compromiso con las metas de integración. Sin embargo, ambas naciones enfrentan desafíos como las diferencias arancelarias y tensiones por una mayor apertura unilateral de mercados. A pesar de ello, los gobiernos de Lula da Silva y Alberto Fernández buscan encontrar puntos en común para robustecer el Mercosur sin perder de vista sus prioridades nacionales.
Las corporaciones y mercados han seguido de cerca estas reuniones entre los representantes de las dos principales economías de Sudamérica. Analistas destacan que cualquier modificación en las reglas del Mercosur podría tener efectos significativos en sectores como el automotriz, agroindustrial y tecnológico, todos ellos estratégicos para las exportaciones argentinas.
En el contexto doméstico, la iniciativa de Massa se da cuando Argentina enfrenta desafíos macroeconómicos críticos, incluyendo una elevada inflación y condiciones restrictivas en los mercados financieros internacionales. De esta forma, el mayor dinamismo comercial mediante el Mercosur podría representar una oportunidad para aliviar, aunque sea en parte, las tensiones económicas internas.
Por ahora, los avances específicos en estas negociaciones serán determinantes para calibrar el futuro del bloque. Mientras tanto, las conversaciones bilaterales entre Argentina y Brasil permanecerán en la agenda prioritaria, con el objetivo de fortalecer alianzas estratégicas que permitan afianzar el comercio regional y extrapolar sus beneficios hacia nuevos horizontes comerciales.