El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, hizo un nuevo llamado a la Unión Europea (UE) para que brinde apoyo económico y solidario con la finalidad de acelerar la recuperación de la Comunidad Valenciana tras los daños ocasionados por el temporal Dana. Durante una intervención en el marco de un encuentro organizado por el Comité de las Regiones en Bruselas, Mazón reafirmó su pedido a las instituciones europeas para obtener respaldo financiero que permita mitigar los efectos de los recientes desastres naturales.
La intervención del presidente valenciano llega en un momento crítico, en el que las recientes lluvias torrenciales y sus efectos negativos han generado importantes pérdidas económicas, afectando tanto infraestructuras públicas como sectores clave para la economía de la región, como la agricultura y el turismo. Según las estimaciones locales, los daños causados por el temporal ascienden a varios millones de euros, lo que agrava la necesidad de soluciones más rápidas y contundentes por parte de la Unión Europea.
Mazón ha sido enfático en cuanto a que el apoyo debe trascender la mera asistencia puntual o las palabras de solidaridad, insistiendo en la necesidad de activar los mecanismos de financiación disponibles a nivel europeo. Entre ellos, ha mencionado la urgencia de movilizar el Fondo de Solidaridad de la Unión Europea para proporcionar una respuesta rápida y eficaz a las consecuencias del temporal. Dicho fondo se creará con el objetivo de proporcionar asistencia financiera a los Estados miembros de la UE frente a catástrofes naturales a gran escala.
La Comunidad Valenciana depende en gran medida de sectores como el agropecuario, que resiente duramente los embates de eventos climáticos extremos. Según el informe presentado por Mazón, las pérdidas en la agricultura local podrían superar los niveles históricos registrados en otros momentos de crisis climática. Además, numerosas infraestructuras viales y centros turísticos también se vieron seriamente afectadas, lo que ha generado preocupación en un contexto en el que la recuperación turística post-pandémica era clave para la reactivación económica.
El presidente valenciano también ha defendido en Bruselas que la región debe convertirse en receptora prioritaria de recursos de los fondos de cohesión, para garantizar la inversión en infraestructuras resilientes que permitan enfrentar futuros desafíos naturales derivados del cambio climático. Asimismo, destacó que la Comunidad Valenciana ya ha comenzado a trabajar en iniciativas dirigidas a mitigar los impactos del cambio climático en colaboración con organismos europeos, pero recalca que sin una solidaridad efectiva de la UE, la recuperación se vería significativamente comprometida.
Finalmente, Mazón espera que este llamado encuentre eco entre las autoridades comunitarias y otros gobiernos regionales, subrayando que una recuperación temprana no solo beneficiará a la Comunidad Valenciana, sino que tendrá un impacto positivo en la estabilidad y el bienestar económico de toda la región mediterránea.