Industria manufacturera china sorprende con expansión en diciembre tras meses de contracción
De acuerdo con un reporte publicado por iEconomia.com, la economía china ha dado muestras de recuperación en el sector manufacturero, indicando signos positivos tras un período difícil caracterizado por desafíos tanto internos como externos. El índice de gerentes de compras (PMI, por sus siglas en inglés) oficial del sector manufacturero subió a 50,3 puntos en diciembre, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas de China (NBS, por sus siglas en inglés). Este es el primer registro por encima de la marca de 50 puntos que separa la contracción de la expansión desde septiembre, lo cual representa un cambio relevante en la dinámica económica.
El desempeño mejor de lo esperado se produce en un contexto en el que China enfrenta numerosas presiones, incluida la desaceleración global, la volatilidad de los mercados energéticos y los desafíos locales vinculados a las estrictas políticas de COVID-19 que habían afectado significativamente la actividad económica durante meses. Los analistas también atribuyen esta recuperación a las recientes medidas gubernamentales que buscan estabilizar la economía y revitalizar el crecimiento en sectores clave.
A pesar de esta mejora en las cifras, no todas las señales fueron alentadoras. Los nuevos pedidos de exportación continuaron disminuyendo, lo que refleja la débil demanda externa en medio de un panorama global aún incierto. Asimismo, la actividad en el sector servicios mostró contracción, con el índice PMI de este segmento situándose en 48 puntos, reflejando los persistentes problemas estructurales vinculados a los confinamientos y una demanda interna todavía tímida.
En particular, es significativo que el repunte del sector manufacturero ocurra en un mes clave, cuando las autoridades chinas relajaron algunas de las restricciones más estrictas del mundo en cuanto al manejo de la pandemia. Esto le ha permitido a las empresas recuperar mayor libertad operativa, lo cual parece haber influido directamente en las estadísticas del cierre de año. Sin embargo, el crecimiento observado todavía es frágil, y las autoridades deberán mitigar los riesgos inherentes a una eventual alza de los contagios.
Por su parte, los mercados financieros han reaccionado con cautela a estos datos. Aunque la noticia de la expansión manufacturera es un buen indicador para los inversores, persiste la incertidumbre respecto a cuán sostenible será este crecimiento en los próximos meses, considerando el panorama desafiante tanto a nivel doméstico como internacional.
En conclusión, el reporte del PMI manufacturero de diciembre ofrece una dosis de optimismo para la economía china y, por extensión, para el comercio internacional. No obstante, los analistas advierten que será crucial monitorear de cerca la evolución de los indicadores económicos y las decisiones políticas del gobierno chino para consolidar el crecimiento económico en 2023.