Rechazo gremial en Perú al aumento del salario mínimo mensual
Lima, Perú – En un contexto de alta inflación y convulsión social, gremios y sindicatos peruanos han expresado su descontento ante el reciente anuncio del Gobierno de incrementar el salario mínimo mensual en un 10,2%. Según lo propuesto, el sueldo básico pasaría de 1.025 soles (aproximadamente 261 dólares) a 1.130 soles (cerca de 288 dólares), una cifra que, para los líderes sindicales, no es suficiente para cubrir el costo de vida actual ni las constantes alzas en bienes esenciales.
El ajuste salarial, que estaba previsto desde inicios de año, fue aprobado por el Consejo Nacional del Trabajo y la Promoción del Empleo, pese al rechazo de una mayoría de los representantes de los trabajadores. Este incremento, que entraría en vigor en los próximos meses, busca aliviar la presión económica sobre los hogares peruanos en un país donde, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la inflación interanual alcanzó el 5,48% en septiembre de 2023.
No obstante, organizaciones como la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) han calificado la medida como insuficiente e insensible frente a las necesidades de la población. Cristian Zavala, presidente del gremio, declaró que el nuevo monto «no representa un real alivio para las familias trabajadoras» y llamó al Ejecutivo a implementar políticas integrales que enfrenten la crisis económica en lugar de «medidas aisladas y simbólicas».
Por otro lado, el empresariado también ha mostrado reticencias al aumento. Grupos empresariales argumentan que la medida podría tener efectos adversos en la formalización del empleo y en la capacidad de las pequeñas y medianas empresas (pymes) para sustentar sus nóminas. En un país donde cerca del 70% de la Población Económicamente Activa (PEA) trabaja en la informalidad, los economistas advierten que ajustes como este podrían intensificar dicha problemática.
El Gobierno, liderado por la presidenta Dina Boluarte, ha defendido la medida como un esfuerzo en beneficio de los sectores más vulnerables. Durante la presentación del ajuste, el ministro de Trabajo, César Rojas, afirmó que esta acción forma parte de una estrategia más amplia para «combatir la desigualdad y fortalecer el poder adquisitivo». Sin embargo, hasta ahora, el gabinete no ha delineado con claridad el resto de las iniciativas complementarias prometidas.
El debate por el incremento del salario mínimo se produce en un ambiente económico ya tensionado por la desaceleración del crecimiento que afecta a Perú en 2023. Analistas coinciden en que el impacto de la medida dependerá de factores como su implementación efectiva y la generación de nuevas políticas para fomentar la formalización laboral y el impulso a la economía en su conjunto.