Sao Paulo cierra la semana con fuerte caída ante temores por la guerra comercial global
La Bolsa de Valores de Sao Paulo (B3) culminó la semana con una pronunciada caída del 3,52%, arrastrada por el recrudecimiento de las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos, una situación que ha elevado el nerviosismo de los mercados internacionales. El índice de referencia Ibovespa se ubicó en los 118.058 puntos al cierre del viernes, después de una semana marcada por una creciente aversión al riesgo entre los inversores globales.
La presión sobre los mercados emergentes ha cobrado fuerza tras nuevos anuncios de represalias arancelarias por parte de China hacia productos estadounidenses, sumado a las medidas adoptadas por Washington en respuesta. Este escenario alimenta el temor a una desaceleración económica mundial, lo que impacta fuertemente en bolsas como la brasileña, que depende en gran medida de los flujos de comercio y materias primas.
Entre los sectores más castigados en la semana se destacan el financiero, el minero y el energético. Las acciones de grandes compañías como Vale, Petrobras e Itaú Unibanco sufrieron importantes retrocesos. En particular, Vale, uno de los mayores exportadores de mineral de hierro del mundo, vio caer sus acciones cerca del 5% ante la expectativa de una menor demanda industrial china. Petrobras, en tanto, cedió más de un 4% en medio de la volatilidad de los precios internacionales del petróleo.
A estos factores externos se sumaron preocupaciones internas respecto al futuro de la economía brasileña, cuyo crecimiento sigue siendo modesto. Si bien el Banco Central de Brasil ha mantenido una política monetaria flexible para incentivar la actividad, los inversionistas se muestran cautelosos ante la incertidumbre política y fiscal del país, que podría agravar el déficit público si no se concretan reformas estructurales pendientes.
El real brasileño también se vio afectado durante la semana, depreciándose frente al dólar estadounidense y generando presiones adicionales sobre los activos locales. Con este telón de fondo, los analistas apuntan a una elevada volatilidad en el corto plazo y sugieren cautela a los inversores, especialmente mientras persistan los conflictos comerciales a nivel global.
Desde ieconomia.com seguiremos monitoreando el desarrollo de los mercados internacionales y su impacto en América Latina. Por ahora, todos los ojos están puestos en una posible distensión entre Washington y Pekín, que aliviaría temporalmente la tensión económica internacional. Sin embargo, los analistas señalan que mientras no se llegue a un acuerdo duradero, la incertidumbre será una constante que afectará a las principales economías emergentes de la región.