La escalada de tensiones comerciales globales impacta en el mercado bursátil canadiense
Buenos Aires – La creciente incertidumbre derivada de la intensificación de la guerra arancelaria entre Canadá y China, sumada a un escenario global marcado por temores de recesión y liquidaciones masivas en los mercados, ha generado una fuerte presión bajista sobre los futuros de las acciones canadienses. El efecto inmediato se reflejó en una caída generalizada en los principales índices bursátiles del país norteamericano, lo que reflota preocupaciones entre inversores e impulsa la aversión al riesgo.
En la sesión de este lunes, el contrato de futuros del índice S&P/TSX 60 ?referencia clave del mercado de valores de Toronto? registró un descenso significativo, cayendo un 0,5%. Esta baja se produce en el contexto de una venta sistemática de activos que afecta a los mercados internacionales, motivada por el deterioro de los vínculos comerciales y las señales de debilitamiento de la economía mundial.
El conflicto comercial entre Canadá y China ha cobrado nueva fuerza luego de que el gobierno chino impusiera una serie de aranceles sobre productos canadienses como represalia a medidas adoptadas previamente por Ottawa. Este nuevo capítulo del enfrentamiento bilateral añade tensión en un momento de alta sensibilidad para los inversores, quienes ya venían reaccionando con nerviosismo al endurecimiento de la política monetaria en diversas economías desarrolladas y al incierto panorama inflacionario global.
Desde el punto de vista sectorial, las industrias más afectadas por la caída en los futuros canadienses han sido energía, materiales básicos y manufactura, que dependen en gran medida del comercio internacional. En este clima de tensión, las empresas con mayor exposición al mercado chino podrían enfrentar una desaceleración en sus ingresos proyectados, lo que genera una recomposición de carteras por parte de los gestores institucionales, en búsqueda de activos considerados más seguros.
Asimismo, la presión se hace sentir sobre el dólar canadiense, que enfrenta una volatilidad creciente frente a monedas fuertes como el dólar estadounidense, al tiempo que se observa un movimiento hacia activos refugio como el oro, el franco suizo y los bonos del Tesoro de EE.UU. En este sentido, analistas internacionales advierten que el mercado está en una fase delicada en la que cualquier escalada en las tensiones podría generar mayores pérdidas.
En diálogo con ieconomia.com, el analista bursátil Federico Martínez señaló: «Estamos viendo una conjunción de factores negativos tanto externos como internos. Las trabas al comercio afectan directamente la confianza del inversor y generan una dinámica que puede extenderse en el corto plazo, dependiendo de cómo evolucionen las relaciones diplomáticas y comerciales».
En resumen, el panorama para los mercados financieros canadienses se complica en medio de una creciente aversión al riesgo global. Las miradas estarán puestas en la evolución del conflicto con China y en los próximos movimientos de los bancos centrales, elementos clave para disipar o agravar el actual escenario de volatilidad.